En el siglo XVII, Isaac Newton hizo una serie de experimentos con prismas y luz. Mostró que los prismas no solo dividen la luz en los colores familiares del arco iris, sino que también pueden recombinarlos. El vidrio de un prisma, y los ángulos de sus lados, trabajan juntos para hacer una herramienta óptica fascinante.
efectos de la luz
Cuando la luz pasa del aire al vidrio, se ralentiza, y cuando sale del vidrio, se acelera nuevamente. Si la luz golpea el vidrio en un ángulo en lugar de un punto muerto, se somete a refracción. El ángulo en el que golpea el vidrio no es el mismo que el ángulo que viaja dentro del vidrio. la luz ya no se mueve en línea recta, sino que se dobla en la superficie. Lo mismo sucede cuando la luz sale del prisma: se dobla de nuevo.
La ley de Snell
Un principio óptico llamado ley de Snell predice exactamente cómo sucede esto. La ley de Snell se ocupa de los ángulos en los que entra la luz y sale de un prisma, y algo llamado índice de refracción. El índice de refracción muestra cuánta luz disminuye cuando entra en el cristal.
cambios de color
Los diferentes colores de la luz, del rojo al violeta, se doblan en ángulos ligeramente diferentes. el rojo se dobla menos, el violeta más. Esto hace que los colores se desplieguen y se vuelvan distintos.
segundo prisma
el hecho de que un prisma puede romper la luz en colores se conocía antes de newton. Pero Newton preguntó qué pasaría si colocara un segundo prisma en la ubicación de los colores. Si el segundo prisma atrapaba todos los colores en una de sus superficies, la luz blanca salía del otro lado. Las mismas propiedades que separaron los colores trabajaron a la inversa para volver a ensamblarlos.
experimentos adicionales
Newton también preguntó qué pasaría si usara un segundo prisma en un solo color. ¿se rompería en otros colores? Su experimento demostró que no. Los colores que salen de un prisma son fundamentales.
reflexión
Además de la luz refractante, los prismas también son buenos para reflejar la luz. Si miras un prisma y lo giras con los dedos, verás la luz reflejada desde la parte posterior en ciertos ángulos. Esto se llama reflexión interna. Algunos prismas están diseñados para tener varias caras reflectantes internas. pueden tomar una imagen del telescopio que está al revés y al revés y voltearla a la normalidad. Los prismas reflectantes se utilizan en periscopios y binoculares, ya que son más duraderos que los espejos.