El mundo natural, como la función de las plantas y la forma en que crecen, es una fuente de asombro para muchos niños y será algo que continuarán estudiando a lo largo de su educación. haga que los niños realicen experimentos científicos basados en plantas durante una unidad de clase sobre la naturaleza o como seguimiento de una visita a un parque o jardín local.
Flores coloridas
En este proyecto de ciencia simple para niños pequeños, llene una taza con agua y agregue varias gotas de colorante para alimentos, como rojo o azul. corta el extremo de un clavel blanco y coloca la flor en la taza de agua coloreada. Haga que los niños miren mientras la flor absorbe el agua coloreada y cambia de color lentamente. Explíqueles que las flores no solo absorben agua del aire, sino que también "beben" agua a través de sus tallos.
crecimiento de la planta
Los niños mayores disfrutarán realizando un experimento más complicado sobre el crecimiento de las plantas. Haga que los niños planten semillas en el centro de dos macetas diferentes llenas de tierra para macetas. una de las macetas debe regarse y colocarse en una zona soleada, mientras que la otra no debe regarse y colocarse en una zona oscura, como un armario. Luego, los niños pueden revisar las plantas diariamente y examinar qué olla prospera. La olla regada colocada en la zona soleada y cálida es mucho más probable que crezca.
experimento de frijol
comience este experimento empapando tres frijoles en dos pulgadas de agua durante la noche. al día siguiente, retire los frijoles del agua y llene tres tubos de ensayo hasta la mitad con tierra para macetas. inserte los frijoles en los tubos de ensayo y llene el espacio restante en cada uno con más tierra para macetas. Coloque los tubos de ensayo en un área cálida y soleada y riéguelos diariamente. Los niños podrán observar todo el proceso de crecimiento de los frijoles a través de los tubos de ensayo. para un experimento más complicado, coloque cada tubo de ensayo en diferentes condiciones de luz y temperatura.
perdida de agua
Este sencillo experimento, que se puede hacer en interiores o exteriores, permite a los niños observar cómo las plantas pierden agua a través de sus hojas. coloque una bolsa de plástico transparente sobre una rama de un arbusto o una sección de hojas de una planta en maceta. Asegure el extremo abierto de la bolsa con cinta gruesa o cuerda, sellando la sección de la planta en el interior. abandone el experimento durante 24 horas, y cuando regrese, los niños encontrarán que el agua de la planta ha sido extraída y recogida en la bolsa de plástico.