una polimerización fuera de control es una reacción potencialmente peligrosa en la que los productos químicos se forman con una velocidad excesiva, produciendo calor que puede provocar una explosión u otros peligros. Debido a que la polimerización es un proceso esencial para hacer muchos materiales sintéticos, los químicos adoptan estrategias para mantener reacciones seguras y evitar la polimerización descontrolada.
monómeros y polímeros
la mayoría de los plásticos y muchas moléculas biológicas pertenecen a una clase de compuestos químicos llamados polímeros: largas cadenas de las mismas unidades químicas que se repiten continuamente. Cada unidad en la cadena es una molécula llamada monómero. por ejemplo, el poliestireno es un polímero que consiste en muchas moléculas de estireno unidas entre sí. En este caso, el estireno es el monómero.
polimerización
Para fabricar plásticos , un proceso químico toma un contenedor de una sustancia monomérica y lo combina con otros productos químicos que inician el proceso de polimerización. Durante la reacción, los monómeros, que normalmente son estables por sí mismos, se enlazan entre sí. las moléculas de monómero se pegan entre sí en cadenas repetitivas, formando polímeros, y continúan hasta que el contenedor se queda sin sustancias químicas de iniciador o monómeros disponibles. el polímero resultante gana propiedades, tales como resistencia y elasticidad, que carecen del monómero original.
polimerización fuera de control
Algunas reacciones de polimerización son exotérmicas, lo que significa que emiten calor. idealmente, el calor total producido es pequeño y se disipa inofensivamente en el recipiente de reacción. sin embargo, si está involucrada una gran cantidad de monómero, y si la reacción es fuertemente exotérmica, los monómeros pueden combinarse demasiado rápido. como consecuencia, el calor y la presión excesivos se acumulan en el recipiente de reacción, derritiendo el equipo o causando una explosión.
medidas preventivas
Los ingenieros químicos utilizan una variedad de métodos para prevenir la polimerización fuera de control. El equipo puede incorporar dispositivos de agitación que ayudan a romper áreas donde la velocidad de reacción es demasiado alta y disipar el calor a través de la mezcla. Un químico puede agregar compuestos, llamados inhibidores, para retardar deliberadamente la reacción, manteniendo la velocidad por debajo del punto en que se escapa. también agregan dispositivos de emergencia que se abren automáticamente si la presión de reacción excede un valor seguro. estos componentes evitan que el recipiente de reacción explote con fuerza violenta.