los científicos diseñan experimentos para buscar relaciones de causa y efecto; donde los cambios en una cosa pueden causar un cambio predecible en otra cosa. estas cantidades cambiantes se llaman variables. muchas otras variables tienen que trabajar juntas para un proyecto científico bien diseñado para ayudar a revelar una relación de causa y efecto.
Ejemplo de experimento de planta
Si quisiéramos ver el efecto de la luz en los girasoles, podríamos diseñar un experimento con tres plantas. el experimentador podría manipular la intensidad de la luz para observar los cambios, colocando una planta bajo una lámpara UV artificial a alta intensidad, una bajo una lámpara UV de intensidad moderada y otra en una habitación oscura. podemos suponer que cuanto menos sol reciba una planta, menos crecerá y decidirá medir el crecimiento de la planta para confirmar o rechazar esta predicción.
La variable que responde es el efecto.
en el experimento de ejemplo, la intensidad de la luz solar actuaría como nuestra variable independiente y el crecimiento de la planta actuaría como nuestra variable de respuesta. todos los demás factores tendrían que ser controlados para descartar otras influencias en el crecimiento, denominadas variables controladas. como experimentador, la variable independiente es lo que cambia, la variable que responde es lo que observa y las variables controladas son lo que mantiene igual. Si descubrimos que hay diferencias al final del experimento, comenzaríamos a concluir que la variable independiente es la causa que afecta a la variable que responde. si repitiéramos el experimento, esperaríamos la misma relación de causa y efecto.
la variable que responde es dependiente
El crecimiento de la planta sería el efecto dependiente de la causa: cambios en la intensidad de la luz. esta es la razón por la cual la variable que responde también se llama la variable dependiente. Esta dependencia se amplifica por las variables controladas. por ejemplo, si colocamos las plantas en diferentes habitaciones a diferentes temperaturas, usamos diferentes especies de plantas o les damos diferentes cantidades de agua, la respuesta del crecimiento de la planta podría deberse a uno de estos factores o una combinación. por lo tanto, es muy importante proteger la variable que responde a través de las variables de control, permitiendo que la respuesta dependa de una sola variable cambiante.
La variable que responde es una observación objetiva.
Podemos observar la variable que responde como un hecho, pero la causa no es un hecho. en el experimento de ejemplo, los cambios en el crecimiento pueden haber sido demasiado pequeños para observar, pero una medición de la altura del tallo podría revelar diferencias entre las plantas. esta diferencia es objetiva, pero no lo es cómo explicamos la conexión entre la intensidad de la luz y el crecimiento de las plantas. la repetibilidad es un factor importante para determinar la verdad de una relación aparente de causa y efecto. los futuros experimentadores pueden usar las mediciones u observaciones fácticas de la variable que responde y compararlas con el efecto en su propio experimento.