La desalinización es un proceso que crea agua de calidad para beber mediante la extracción de sal y otros minerales del agua de mar, agua subterránea salobre o aguas residuales tratadas. La desalinización produce entre 15 y 50 por ciento del agua potable por volumen de agua de origen. el resto termina como desecho, llamado & ldquo; salmuera & rdquo; La tecnología ha mejorado la eficiencia de las plantas de desalinización, disminuyendo sus costos hasta en un 300 por ciento. Hay muchos beneficios para la desalinización que la convierten en una tecnología prometedora para un mundo cuya demanda de agua limpia es cada vez mayor.
conservación de energía
Los sistemas de distribución necesarios para bombear agua a través de estados enteros consumen enormes cantidades de energía y generan una gran cantidad de contaminación del aire. La colocación estratégica de plantas de desalinización reduce estos costos de energía y disminuye el impacto ambiental de la distribución de agua. Aunque estos beneficios deben contrastarse con el hecho de que las propias plantas requieren grandes cantidades de electricidad, se han realizado avances en el diseño de las plantas que reducen el impacto ambiental de las plantas de desalinización. La más importante de estas mejoras implica la construcción de plantas de desalinización en el mismo lugar que las plantas de energía, donde tienen una relación simbiótica, cada una mitigando el impacto ambiental del otro.
alivio de la sequía
En tiempos de sequía severa, el agua disponible a través de la desalinización protegería contra la escasez de agua.
agricultura
Un mayor suministro de agua de las plantas de desalinización disminuiría la necesidad de los municipios de redirigir el agua que se necesita para la agricultura en tiempos de escasez de agua.
hábitats de peces
Los hábitats de los peces se erosionan cuando el agua de los lagos, ríos y aguas subterráneas se desvía para uso humano. El aumento de los volúmenes de agua obtenidos mediante la desalinización del agua de mar permitiría la restauración de estos hábitats. Sin embargo, estos beneficios deben sopesarse frente al impacto destructivo que las plantas de desalinización tienen en el ecosistema marino.
autosostenibilidad
Para muchas comunidades costeras que tienen un suministro de agua local inadecuado, una planta de desalinización podría liberarlos de la dependencia de fuentes externas para su agua. El control local de los recursos hídricos es fundamental para la capacidad de una comunidad de ser autosuficiente.
diversificación
Cuando las ciudades tienen fuentes diversificadas de agua, son menos vulnerables a las fluctuaciones de cualquier fuente. Esto permite una mayor estabilidad económica para los municipios, una mayor disponibilidad confiable y tarifas más consistentes para el consumidor.